Aquí lo hacemos como antes: con producto casero tradicional y con el cariño de quien cocina para su gente. Pero también como ahora: abiertos a la comida mediterránea con la actitud de quien disfruta de cada momento, sin prisas y con carácter.
Puedes desayunar con calma, venir a una comida de negocio, probar nuestro menú del día en Azca, alargar la sobremesa o cenar entre amigos: aquí el tiempo lo marcas tú.